IU DENUNCIA QUE EL PP OBLIGA A IDENTIFICARSE A LOS VECINOS QUE QUIERAN ASISTIR A LOS PLENOS

El Pleno del Ayuntamiento es el acto institucional más importante de la  vida política municipal, donde se toman las principales decisiones que afectan a los vecinos y vecinas y, por ley, sus sesiones deben ser públicas.

Desde el mes de diciembre, el Gobierno Municipal del PP, sin justificación alguna y sin ningún tipo de regulación, ha decidido poner un control de acceso para identificar y apuntar los datos de vecinos y trabajadores del Ayuntamiento que quieran asistir al Pleno. Con mecanismos bastante rudimentarios, una mesa de colegio y un listado en papel, agentes de la Policía Local obligan a identificarse a los ciudadanos para permitirles el acceso a este acto público, sin explicar el motivo y sin aclarar siquiera dónde quedan registrados esos datos ni el destino final de estos, lo que puede suponer una violación de la Ley Orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal.

Las justificaciones dadas por el  Alcalde Narciso de Foxá, ante la protesta de algunos vecinos que han asistido a las últimas sesiones y las preguntas de Izquierda Unida, han sido que Majadahonda es un municipio de gran tamaño por lo que es necesario garantizar la seguridad y evitar que entre al Pleno “un loco con una pistola” o,  reconocer públicamente, que pretende evitar las protestas de trabajadores municipales con los que existe un conflicto laboral por los numerosos recortes practicados por el equipo de gobierno del PP de manera unilateral y sin negociación.

Juancho Santana, Portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida – Los Verdes en Majadahonda comentó “El PP  presume de hacer una Majadahonda transparente pero nada más lejos de la realidad: se cambió el horario de celebración de los Plenos de la tarde a la mañana para evitar que la mayoría de los vecinos puedan asistir, no permite que se graben los ruegos o preguntas que hacen los vecinos y vecinas, lleva años sin convocar los consejos de participación ciudadana… Y ahora, este nuevo ataque la participación vecinal pretendiendo controlar el acceso al Pleno y con ello asustar a los ciudadanos y ciudadanas que deseen asistir y participar de la vida política del municipio y aportar sus quejas o sugerencias”.